Sin Temor… Ni Favor…
Desayuno Escolar I
Luis H. Arthur S.
Hay tantos periodistas, columnistas y comunicadores deshonestos, que no se respetan, que quieren “llegar pronto”, como luce ser la norma de los tiempos en que vivimos, que por dinero están dispuestos a darlo todo, y cuando digo todo es todo, hasta su pluma y su integridad como personas.
Escriben, dicen, analizan y combaten según las órdenes recibidas. Están como ratas atentas a los independientemente para roerlos, tratando de desmeritar, con mentiras, inventos y calumnias, Son como la fuerza de choque de los choferes públicos que dan palizas y destrozan los carros de los infelices que invaden rutas y no están asociados y pagan cuota al sindicato de los dueños del país.
Los periodistas honestos, que hay unos cuantos y están en proceso de desaparición, pues el estado y los deshonesto, conspiran, difaman y sentencian contra ellos.
Siendo justo, todos los seres que viven en sociedad e interactúan de alguna manera, tiene nexos afectivos o jerárquicos y no son 100% libres. No pueden serlo además por aquello de que mi derecho termina donde empieza el derecho ajeno. Siempre tendremos condicionantes naturales y campos vedados, donde tenemos que auto censurarnos, lo cual no podría catalogarse como deshonestidad, porque no hay otra forma de vivir en una sociedad armónica, por tanto al referirme a deshonestidades estoy hablando de excesos no de excepciones. Todos sabemos que cualquier exceso, aun de dinero, es malo y algunos denigrantes.
Huchi y Nuria, que son los íconos de moda de honestidad e independencia, deben de tener los suyos, los que no deben confundirse con adhesiones y compromisos y querer sindicarlos al servicio de partidos o personas.
Voy a escribir una serie de artículos sobre LADOM quizás esta vez más objetivos, sin que ellos, como ningún artículo de nadie sea la verdad absoluta, pues a pesar de la época de libre y abundante información en que vivimos, esto es totalmente imposible, pues siempre habrá secretos o informaciones escondidas en lugares no buscados.
Lo importante es que exista honestidad, deseos de mostrar realidades y errores, que traigan un debate en que la verdad única al cabo brille aunque sea agradable o desagradable
Ese es mi propósito.
S. Domingo, R. D. * luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com * 20\X\2008
