REFLEXIONES
Por: Luis H. Arthur S. www.luis.arthur.net www.luisharthur.blogspot.com 26 Agosto 2007
Supongo que antes de que nuestros ancestros supieran crear el fuego, lo tomaban de los incendios forestales naturales y no lo dejaban apagar.
Al contar con el fuego, surgieron muchas necesidades que lo requerían, como cocinar, hacer cal, calentarse, fundir metales, más todas las que fueron surgiendo día a día. Aun hoy, el fuego al incendiar unos carburantes que se agotan y extraerles su energía térmica, mueve nuestros generadores, nuestros motores, cocina para nuestra comida.
Es interesante observar que hoy al igual que ayer, toda nueva tecnología generalmente necesita del uso de otras más viejas en las que se apoya.
Para hacer un calentador de agua solar, de energía limpia y no contaminante, es necesario disponer de tubos, planchas y tanques metálicos, vidrio y aislantes. Para un panel fotovoltaico o un generador eólico o hidroeléctrico, necesitamos tambien muchos insumos, todos hechos con energía proveniente de las fuentes que ahora tenemos y que nos contaminan.
Por eso los ecologistas hablan de que la energía limpia, la no contamínate, tiene un pasivo, una deuda contaminante, y hasta dicen que contaminaron por adelantado haciendo más daño. Esto deuda irá disminuyendo a medida que las próximas generaciones de equipos sean fabricados con las energías no contaminantes de estos equipos.
Traigo esto a colación, porque para poder acceder a energías más limpias, tenemos necesariamente que contar con la energía que ahora tenemos. Si dejáramos que los insumos energéticos se agotasen, será imposible crear los equipos actuales y futuros que las nuevas tecnologías nos traerán. Por eso el Sir Fred Hoyle, que cité en un articulo anterior, decía que si nos acabamos todo, si esta raza humana fracasara, ninguna otra podría desarrollarse en este planeta, pues no contaría con los elementos básicos para lograrlo.
Todo campesino sabe que de cada cosecha tiene que dejar parte para semillas y nuevas cosechas, pues de lo contrario ahí se acaba todo.
Ahora, que aunque declinando aun tenemos insumos para crear energía, tenemos que tomar las medidas para usar parte de ella en producir los artefactos que nos permitirán seguir viviendo.
Es bueno reflexionar, prever el posible futuro, y establecer estrategias para cambiarlo.
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