Sin Temor… Ni Favor…
Con esposas y grilletes
Luis H. Arthur S.
El Padre Francisco Xavier Billini, nacido el 1 Diciembre 1837 en Cuba, de padre italiano y madre dominicana, hizo sus estudios en el Seminario Santo Tomás de Aquino y fue ordenado sacerdote en Puerto Rico en Abril del 1861, oficiando su primera misa en Junio de ese mismo año en Regina Angelorum. “Fue Director del Colegio San Luis Gonzaga durante 26 años. Prestó servicios en varias parroquias de diferentes localidades del país y en 1867 fue Vicario General de la Arquidiócesis de Santo Domingo. En 1869 funda la Casa de Beneficencia donde mantenía personas desvalidas, y crea varios periódicos entre los cuales se cuentan “La Crónica ” y “El amigo de los niños”. Establece además una Biblioteca Popular para favorecer a las personas de escasos recursos. Dedicado a la caridad y a la enseñanza, no dudó en pedir ayuda a los gobiernos para destinarla a los necesitados”.
“En 1880 solicitó al Poder Ejecutivo, presidido en ese momento por el doctor Fernando Arturo Meriño y Ramírez, el edificio del Hospital San Andrés para dedicarlo a sus obras de beneficencia. Hoy día es un moderno hospital que lleva su nombre.
Entre sus actividades se recuerdan la fundación de la Lotería de la Junta de la Caridad cuyos beneficios eran destinados al bien social. A la hora de su muerte el 9 Mayo de 1896 pidió “Atenme, las manos y los pies…” Acuéstenme para reposar así con toda humildad””. (www.educando.edu.do)
Esa lotería que él fundó para el bien social, se ha convertido con el paso del tiempo en botín de políticos y militares. Los premios se han vendido con desvergüenza, sus fondos además de alimentar al gobierno, han servido de fuente de depredación. Modernamente ninguno de los que la ha presidido se ha puesto las sandalias del Padre Billini, y hoy, un joven, hijo de Peña Gómez como único blasón que mancha inmisericorde, reparte millones entre legisladores insaciables, sin bolsillos derechos e izquierdos para tanto dinero como reciben, con pocas excepciones, reciben de este “señor” supuesta caridad para juguetes, cuando tantos pobres viven en la miseria y hasta venden un dedo cercenado para seguir viviendo. Ahora, cuando el Hospital Padre Billini carece de tanto y trabaja con las uñas. Ese “político” quizás al morir deba llevar esposas en sus manos y grilletes en sus pies. Amén.
S. Domingo, R. D. * luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com * 29\I\2009