Sin Temor… Ni Favor…
¿Cuánto Valgo II?
Luis H. Arthur S.
Con esta segunda entrega completo el interesante artículo del Ing. Diego A. Sosa. Escritor, Consultor, Coach y Facilitador de Empresas y Profesionales a nivel Internacional. CEO Mercurio Entrenamiento y Consultorías S. A., cuya primera parte publiqué en el día de ayer, y que espero les sea de mucho provecho a los jóvenes y a los no tan jóvenes, que aun no encuentran ni ven bien su camino y que viven confiados en la suerte.
“Recuerde que “creer es poder”. Lo primero que tiene que hacer es perder ese miedo y dar ese primer paso. Todo camino de mil millas comienza con un paso, decía Benjamín Franklin. Entonces dé ese primer paso de perder el miedo.
El segundo paso es descubrir lo que quiere... dónde quiere estar en tres años. Si no define su propósito, no podrá definir su objetivo y mucho menos su plan para llegar a él. Así que vea en el futuro cercano qué es lo que quiere lograr.
El paso número tres es trazar su plan para lograr su objetivo. Ya sabe dónde quiere estar, así que ahora póngase un objetivo; defina cómo llegará a su propósito. Tendrá que dar pasos importantes, pero son obligatorios para llegar. ¿Cómo, cuándo y dónde? Está es, o son sus preguntas.
Luego de trazado su plan; no se detenga. La meta está cerca, así que no dude en seguir su plan y sin ser cabeza dura, ser persistente en el camino correcto. Hágalo usted mismo y verá como dejará de depender de los demás para saber cuánto usted vale.”
La raza humana se caracteriza por su capacidad de pensar, si abandonamos total o parcialmente esa condición que nos da ventajas sobre todas las demás criaturas que comparten nuestro planeta y sobre el medioambiente que nos rodea, nos estamos degradando y permitiendo que otros más capaces, nos sobrepasen y nos releguen.
En artículo que he compartido con todos, es una guía para que enfrentemos la realidad con inteligencia, nos preparemos y podamos avanzar y desarrollarnos ética y moralmente, sin tener que vender nuestra dignidad, nuestro honor al tener que alabar, servir a otros en una grado de servidumbre vil y denigrante, pues no hemos tenido el coraje de enfrentar la vida con las armas de nuestro entendimiento, siendo cada día más capaces y más valiosos. Más valorados.
Sto. Domingo, R. D. * luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com * 5\VI\2008