lunes, octubre 10, 2005

SECTOR ELECTRICO I

SECTOR ELECTRICO I

Por: Ing. Luis H. Arthur www.luis.arthur.net www.luisharthur.blogsopot.com 10 Oct.2005

Los Dominicanos despreciamos lo nuestro y amamos lo que nos llega de fuera.
La Capitalización de la Industria Eléctrica se hizo copiando el modelo de Chileno y Bolivia, sin percibir nuestra condición diferente, de media isla, con frontera con un país que por desgracia esta más subdesarrollado que nosotros y no tomando en cuenta nuestra escasa superficie geográfica. El de ser un sistema aislado sin posibilidad fácil de interconexión con vecinos.

Por la premura del término de un período gubernamental se hizo a la carrera, sin ley ni marco regulatorio, sin tener el personal capacitado en mercados eléctricos, sin tiempo para que las ideas maduraran y las adecuaciones se hiciesen, apurados por organismos internacionales, pensando que lo que se lograba era un triunfo que podría ponerse como un “Haber” en el balance político del cuatrienio.

Todo resultó fallido, y como aquel dicho que “el que escupe para arriba la saliva le cae en la cara”, hoy de nuevo el mismo gobierno, quien retornó como esperanza al desastre que le siguió, se encuentra que el Sector Eléctrico está mucho peor que cuando se pregonó con bombos y platillos que un problema de cuatro décadas había entrado en una fase de solución definitiva.

Claro, el buen político siempre encuentra a quien echarle la culpa de los errores y metidas de patas, y el gobierno pasado es el culpable favorito. Lo propio decía el anterior gobierno, pero es innegable que hace un año, cuando este gobierno recogió los jirones de país dejado, aun así, el Sector Eléctrico estaba mucho mejor que ahora. Esta administración en sólo un año ha deteriorado el sector a tal punto que hasta sus funcionarios le enrostran su falta da acción, aunque unos lo digan en forma de “yo sueño”, y otros se excusen después que le increpan sus opiniones, temerosos posiblemente de perder su cargo o caer en desgracia con los mandamás de turno.

¡Los Dominicanos no servimos! Por eso para poder establecer políticas de simple administración para lograr un negocio sano, evitando robos y cobrando las facturas emitidas, hay que traer personal sur-americano a suplantar los actuales administradores, sin que estos se vayan (¿?). (Debe de ser algo así como ese invento de presidente en funciones en presencia del presidente). Políticas de buena administración que todo empresario conoce y la mayoría implanta con éxito en sus negocios, sean estos tan pequeños como una microempresa o tan grandes como el Grupo León.

Y es que entre los muchos problemas que tiene el Sector Eléctrico, ninguno es tan acuciante y mortal como recuperar de los usuarios solo el 50% de la energía servida, que se le compra y se le paga a los generadores, perdiendo el otro 50%. Cualquier empresa privada hace rato hubiese quebrado por ese mal manejo y política desastrosa, pero no las Edes: Norte, Sur y Este, que sin ser empresas públicas, sino privadas, compensan esta falta de gerencia con mazazos tarifarios en el lomo de los usuarios, quienes hoy pagamos la electricidad más cara del mundo, en este ambiente de competitividad impuesta, que en el caso nuestro es competitividad negativa. Y como si fuera obra de Merlín, con este esquema de operación y esquilmación de usuarios, Edesur tuvo beneficios por más de RD$150 millones en el 2004, que alcanza para dar parte a sus eficientes funcionarios, en vez de utilizarlos para la compra de equipos para atacar y combatir el fraude eléctrico. Ganancia que sólo se justifica por la inacción y desesperación de un gobierno que habla lindo, pero que mantiene esquilmado a su pueblo.

Gobierno que permite que los organismos internacionales sean lo que gobiernen, con gran desmérito de sus funciones. Aceptando que ellos receten una limitación del suministro a sólo al 70% de la demanda, produciendo apagones interminables, mientras existe generación suficiente para suplir el 100%. Permitiendo que el sector se deteriore, que la deudas del gobierno aumenten de US $350 millones que estableció en presupuesto para el subsidio, cuando lo recibió hace un año casi en cero, a US $500 o US $700 millones como se espera al concluir el año fiscal, debiendo además a los generadores una cantidad astronómica en una deuda creciente que malogra la revisión tres veces cacareada de los contratos.

Mensajes todos que alientan la piratería de oportunistas, y dejan en estado de shock a todos los usuarios. A todas luces hay un mal manejo del sector, que ha desbordado a un Presidente que habla lindo, y que conoce el diagnóstico, pues ayer nos dijo que el 80% de lo no cobrado y sustraído no era de los barrios marginados, que desde hace tiempo se sabe que es de un 10% a 15%, donde recibe a pedradas o le caen a tiros a los inspectores y hacen manifestaciones de protesta, a las que tanto teme el gobierno. No, él sabe que es en la clase media, clase alta, comercios e industrias, militares y políticos y oficinas gubernamentales donde estas pérdidas se producen. Que muchas son por fallas técnicas de mala medición por abulia o componenda. ¿Y que se hace? ¿Sólo mandar a cobrar por enésima o centésima vez sin que nadie le haga caso?

Hoy los organismos internacionales le condiciona un préstamo de US $150 millones para que las Edes del estado mejoren sus cobros (todo aquí se hace a base de préstamos), a que CDEEE se divida en una compañía de Transmisión y otra de Hidroeléctricas, según lo establece la Ley General de Electricidad 125-01, manteniéndose ella (CDEEE) sólo como otro agente más del sistema, manejando los IPP y la electrificación rural. El primer desembolso de US $50 millones se haría a la aprobación y firma de este acuerdo, sujeto a que el índice de recuperación de efectivo (CRI) de las distribuidoras haya aumentado a 55% a partir de los dos meses calendarios previos a la liberalización del primer desembolso, que se siga aplicando la formula para el ajuste automático de las tarifas eléctricas al detalle en función de las variaciones de la tasa de cambio, precios de combustibles e inflación y que se hayan creado las empresas de Transmisión e Hidroeléctrica, cada una con personería jurídica propia separada de la CDEEE, capital y estatutos. El segundo desembolso, cuando el CRI aumenta a 60% en los dos meses previos al desembolso, se continúe aplicando la formula de ajuste de la tarifa eléctrica a los usuarios tomando en cuenta las variaciones de la tasa de cambio, precio de los combustibles e inflación y que el Gobierno haya anunciado una opción y su compromiso con dicha opción, para la participación del sector privado en la distribución. El contrato de préstamo abre la posibilidad de que tanto las empresas de Transmisión e Hidroeléctricas puedan pasar al sector privado, un viejo sueño añorado por los organismos multilaterales como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de desarrollo (BID) y la Agencia Internacional para el desarrollo (AID) y la tarea inconclusa y pendiente del proceso de capitalización llevado a cabo en el 1999. Esto es, nos darán otro Palo de la Gata…y todo lo nuestro seguirá dejando de ser nuestro, como lo será próximamente el viento de Baní.

Para allá vamos con estos patriotas de hablar bonito que nos gobiernan.

No es cierto que el aumento desmedido del petróleo sea el culpable de la tarifa con que nos esquilman. Actualmente los Usuarios no Regulados que compran directamente a los generadores, cubriendo su potencia demandada, su energía consumida y el peaje de transmisión pagan el consumo a US $0.10 el Kwh, esto es a $3.05 pesos dominicanos. Las distribuidoras compran a precio similar, mientras yo en mi casa, como un gran favor por no darme otro tarifazo con que a diario amenazan, me siguen cobrando a $7.46 el Kwh. Del generador al usuario residencial, hay $4.71 pesos de diferencia, esto es el 154% del costo de compra como margen de operación. Si San Agustín vivera, ¿lo calificaría de agiotismo?

Si el costo de la energía sobrepasa la capacidad de pago de los usuarios, por ser desproporcionadamente cara y malamente gerenciada, ¿cómo no quieren que haya robos?

La DGII debería de mandarle sus inspectores a esa empresa privada, que supongo paga impuestos al igual que ellos le cobran a la señora que hace comidas para los obreros de cualquier construcción en la acera de la calle, con un anafe improvisado.

Fin