CUANTO TIEMPO NOS QUEDA?
Luis H. Arthur S. http://www.luis.arthur.net/ http://www.luisharthur.blogspot.com/ 28 Octubre 2005
El Sector Eléctrico es un caos. El consumidor es maltratado hasta lo increíble. Dos empresarios eléctricos con el 60% de la generación, contrario a la ley que prohíbe vinculaciones entre empresas y oligopolios, manipulan y gobiernan este sector, sin importarles que una vez los ingleses y los argentinos se enfrentaron por las islas Falkland o Malvinas.
El vice-presidente de CDEEE nos dice que no hay solución. El superintendente en tertulia de Herrera nos dice que no hay solución y ahora nos amenaza con un aumento del 10%. El Estado bota $500 o más millones de dólares, que las distribuidoras no cobran, como consecuencia del sobre precio de Kwh y de la mala gerencia de las Edes. Existe estafa desde la Capitalización por contratos onerosos y fórmulas de indexación tramposas. La Crep fue advertida. Hicieron un trabajo muy deficiente, apresurado y dañino. Ante el hecho el Acuerdo de Madrid ayudó de corregir un poco, y como sabana que no alcanza, tapó una parte y descubrió otra, pues toda negociación es un toma y d‘aca. El Gobierno ha sido superado por la crisis. Los Organismos Internacionales, responsables grandemente de imposición del modelo, gobiernan el sector y como nadie quiere admitir el pecado original, opinan, parchan, e informan sin ser expertos, desinformando y condenando a esta media isla de Dominico-haitianos, a una situación desesperante. Y prestan más dinero aun sabiendo que se irá a la basura.
Para controlar al oligopolio energético del “Dúo Dinámico”, nos refugiaremos en un posible dominio Malayo. Todo por no agarrar el toro por los cuernos.
Dicen que los males no vienen solos.
El transporte público es otro caos, donde el dinero se va entre las manos corruptas de políticos, sindicalistas y vivos. No hemos podido implementar un sistema racional de transporte como tuvimos y tienen todos. Los sueños faraónicos recetan un metro subterráneo. Que cueste todos los millones del mundo que no tenemos, pero donde haya mucho para muchos, y poco para el pueblo excepto pagar los desatinos del túnel económico, y se empieza a toda prisa, sin presupuesto, sin transparencia, con la oposición de tantos, antes que el RDCafta obligue a concurso. En un país con dos estaciones: verano e infierno, donde no cae nieve, no hace frío, no hay buen mantenimiento, no hay divisas sobrantes ni petróleo, ni electricidad para iluminación y ventilación constantes, para bombas de drenaje. Donde llueve a cantaros que inunda y hay ciclones y los drenajes se tapan porque tampoco sabemos recoger la basura que tiramos. Donde como a tontos y tarados nos dicen que 10 km desde la antigua Cementera a la Feria, va a resolver el transito de todo Santo Domingo, en sentido contrario al crecimiento de la ciudad. Donde los asaltantes tendrán un subsuelo solitario. Donde la policía y la seguridad pública son tan deficientes y la delincuencia lo arropa todo.
Y no lo digo sólo yo, también el Secretario de Interior y Policía, nos habla reiteradamente de que la mitad de la fuerza policial está en “Servicios” (guardaespaldas, choferes, cuidadores o sirvientes de políticos, militares, privilegiados, sus familias, sus queridas y sus propiedades). Sólo denuncias que llevan meses. Sin que aun se haya aclarado los millones que le dieron a la Policía para su modernización y que él cuestionó su destino.
Donde hemos perdido el control de lo básico: las Actas civiles, los Pasaportes y el Padrón.
Donde un acta de nacimiento sólo vale por tres meses, durando menos que una jagua.
Donde la Justicia con un nuevo código deficiente es la bendición para los delincuentes. Lo dicen los abogados serios y hasta la jueza del caso Renove. Donde hubo una sentencia que no guarda ninguna proporción con el delito. Los 1000 millones se esfumaron y seguirán siendo dueños de lo mal habido, y las multas no serán cobrables, pues ya el código no contempla días de cárcel por pesos. Nadie acepta sus lagunas y deficiencias y legisla modificaciones. Parece como si nosotros fuéramos los delincuentes y los delincuentes los honorables.
Donde el Secretario de la Presidencia nos dice que cambiaron gobernabilidad por justicia, en lo que yo he llamado un jueguito de “pecados y perdones”, pues en realidad más parece algo así como “no me saques mis trapitos y yo no te saco los tuyos”. Los 5 exfuncionarios sueltos bajo fianza y pendientes de juicio por el caso Peme, repiten como altos funcionarios, en un meta-mensaje elocuente del Presidente que habla bonito, a todo el pueblo.
El mismo que como máximo representante de un pueblo libre recibe a un procónsul jefe del FBI que le dice lo que se tiene que hacer, y lo acepta sin ponerse rojo o morado de vergüenza; ya sus agentes operan en nuestras fronteras, sin que nosotros podamos siquiera pensar en opinar sobre las de ellos, fronteras nuestras por donde pasan camiones y trailer “invisibles” cargados de todo tipo de bebidas finas y otros contrabandos, y por donde hay un trasiego descarado de haitianos, sin que nuestras “siempre gloriosas” se percaten de nada.
Luce que como Estado y como pueblo ya hemos perdido hasta la dignidad, que no es lo mismo que el PBN, y nos apena escuchar frases de desaliento, desesperación e incapacidad como: “Ya le dijeron…” “Van a tener que hacer algo…” ”Que bueno que eso no se va a quedarse así…” “Los yanquis no juegan”…
Todo esto da vigencia a la tesis de que cada día avanzamos más hacia la disolución de la nacionalidad, ante la pasividad cómplice de todos nosotros, sólo preocupados en el hoy y el yo.
Fin
