domingo, abril 13, 2014

SIEMPRE A LA ZAGA

Sin Temor… Ni Favor…

Siempre a la zaga
 Luis H. Arthur S.
Desde mi último artículo sobre Pares Biomagnéticos y Bioenergética, se ha avanzado mucho, no tanto en cuanto a los principios básicos y práctica de terapias que se van perfeccionando cada día, sino en cuanto al reconocimiento del mundo científico y a la multiplicación de terapeutas en el mundo.
Nuevas universidades la están reconociendo y preparan terapeutas y profesionales con su aval para mejorar la salud.
En nuestro país la gente se sigue muriendo de enfermedades que son curables con esta terapia de imanes y sin medicinas.  Enfermedades tan sencillas como el dengue normal o el hemorrágico, que no solo mata a los pobres que siempre y en todo lugar son las más vulnerables, sino también a los ricos.
Ahora Salud Publica anda más asustados que un gato por una enfermedad similar pero más benigna que lleva un nombre extraño “Chincungunya”, Artritis Epidémica o Fiebre Chicungunya, que significa “enfermedad del hombro encorvado” por el dolor de la artritis, su origen es viral del Alfa Virus trasmitida por el mismo mosquito Aedes Aegipty o el Aedes Albopictus.  Dura de 4 a 7 días y la mortalidad es de 0.4%,  (http://es.wikipedia.org/wiki/Chikungunya), los médicos alópatas no podrán curarla por serles imposible matar virus, que ni comen, ni respiran, como no curan ni el catarro ni el sida.
Quizás con esta nueva enfermedad descubierta en 1953, surja otro negocio mega millonario como el Tamiflú, que ahora tiene muy mala prensa.  Aun Salud Publica no implanta fumigación masiva de mosquitos, y deja que cada uno haga lo que pueda.
Nuestro país, dependiente al 100% de lo que otros países hacen, no está interesado en ni siquiera experimentar con esta y otras nuevas técnicas de curación, y permiten que nuestra gente muera, pues en ese dejar no hay ni responsabilidad jurídica ni de conciencia, son cosas de Dios.
Ya luce estar llegando el momento de la medicina automática en que te recetan pastillas para la Presión Arterial y para la Diabetes, aun sin tenerla, quizás por un análisis puntual en momentos aislados o pura sospecha, pues al cabo las estadísticas internacionales a veces amañadas dicen que para allá vamos, por lo que mejor ellos se adelantan.
Todo ser humano es cuerpo, mente y emociones y no puede ser separado pues son interdependientes, y actúan todas en consonancia.
Ninguna Universidad de las muchas dominicanas se ha interesado en dar cursos, Diplomados de Biopares y Bioenergía, y si bien hubo una que hizo contacto con el Dr. Goiz, su descubridor, cuya carta él me mostró, consideró a la postre que cobraba demasiado y no le iba a ser rentable que viniera al país a dar un curso y preparar gente.  El costo de tratar de resolver un solo paciente de cáncer, es muchas veces superior a esta inversión.
Salud Pública tampoco se ha dado por enterada que esto existe y que cura, y que no es justo que se siga muriendo gente que, como dije, se puede sanar sin medicinas, rápidamente, sin dolor, y sin causar ningún daño si es que no hace bien.  El Dr. Salvador Gutiérrez Rodriguez, un médico español, dice que se podría economizar hasta en un 90% del gasto en medicinas de Salud Publica.
Como muchos saben yo tuve que tomar el curso primer nivel en México y el 30 de Mayo empiezo el segundo nivel allí mismo, y luego de presentar tesis podré optar por el Certificado Universitario y ofertar cada día mejor terapia a quien me lo demande.
Insisto en que no es magia ni milagro, es ciencia y aunque en la mayoría de los casos la gente queda curada en una sesión de una hora, otras veces requiere de varias, pues cuando alguien me dice, tengo 10 años yendo con médicos y me siento igual o peor, no puede pretender curarse totalmente con visitar a un terapeuta una vez.  Eso a veces no es posible y menos con órganos ya muy afectados y degenerados por la enfermedad y el tiempo.
Lo bueno es que cura el Parkinson, la Fibromialgia, la Culebrilla, las Hepatitis, la Artritis, el Cáncer (si no le han dado quimio o radio terapias), la doble personalidad, esquizofrenia, la Tuberculosis, etc., por solo hablar de algunas que se dicen incurables.
Tiene uno que mortificarse al ver como siempre vamos a la zaga, y hoy pienso no solo en medicina, sino también a la agricultura.  Mientras envenenamos pacientes con quimioterapia y radioterapia y medicinas, también envenenamos los campos con agrotóxicos, y ambos manifestaciones para la vida, van directamente afectando negativamente al ser vivo que las consume.