viernes, abril 16, 2010

POBRE HAITÍ

Sin Temor… Ni Favor…

Pobre Haití

Luis H. Arthur S.

En 11 de Febrero 2011 se cumple el período para el que fue electo el presidente con minúscula Preval del vecino Haití. La elección presidencial debe ser en Noviembre 2010.
Las elecciones legislativas debieron celebrarse el 28 Febrero pero con lo del terremoto del 12 de enero, en ese tiempo sólo se podían contar muertos y no votos. Esto mortificó extraordinariamente a Preval, pues según decía él, tenía “ganadas” esas elecciones que por primera vez le daría el control del poder legislativo. Pero le llegó a ese sufrido pueblo una catástrofe sin parangón, que ha sacado a la luz pública tantas precariedades, miserias e iniquidades, mucho mayores que las conocidas y sospechadas.
Haití es un pueblo sufrido y discriminado. Primero que por otros, por su propia élite, que es su peor yugo. Siempre lo ha sido. Se apropian de su poca riqueza, viven bien, fuera y dentro, en desmedro de los pobres, que mantienen en un estado primitivo, casi salvaje. Se roban todo, los discriminan y su gran empeño es encontrar culpables a quienes responsabilizar de sus actos, de su miseria, la falta de salud, educación, trabajo, esperanza, y depredación ambiental.
El presidente Preval cuando el terremoto en vez de engrandecerse, se fue al aeropuerto, dicen que buscaba cómo abandonar el país y retornar a su vida en los EE.UU., lo detuvieron y en vez de actuar, sólo se lamentaba ante sus amigotes, que él había perdido más que ellos, pues su casa y el Palacio habían colapsado. Él se preocupaba en esos primeros momentos de tragedia y se sigue preocupando principalmente de sus intereses personales, mientras afuera, otros contaban los muertos y la ciudad y el país no tenía gobierno alguno, sólo un vacío de poder. Preval se enajenó de sus responsabilidades y aquello fue y sigue siendo un caos político y social en manos de extranjeros y de quienes quieran mandar.
Su gran preocupación no era los miles de muertos y los millones de heridos y damnificados a quienes no le llegaba la ayuda por el desorden existente, y por la falta de dirección, de una mano firme que dirigiera, ordenara. Su gran preocupación era que no se había podido reelegir y antes que nada, tenía y tiene que chantajear con la desgracia de su pueblo a la comunidad internacional, que se ha abierto en millonaria ayuda que no puede canalizar adecuadamente, hasta que se le resolviera su situación política, que sigue siendo lo más importante y prioritario. En visita a Washington esa fue su agenda.
Se comenta que quiere que le den tres años más de vigencia, a puro dedazo, y para ello hasta sacrifica el poder legislativo que supuestamente iba a ganar, pidiéndoles su ayuda a todos los actuales electos, y que todos a una, como Fuente Ovejuna, pidan a coro el quedarse. Lograr una simple extensión por tres años para todos, bendecida por los estados extranjeros. No se toma en cuenta que sólo 3 millones fueron afectados de los 10 que componen esa nación. Ahora habla de que se quiere ir y no reelegirse.
En un momento dado hasta se atrevió a pedir el cese de la ayuda internacional, frustrado quizás porque ni le han resuelto lo político ni tantos millones han llegado a sus manos ni a la de esa élite corrupta y depredadora, que está engolosinada con el anuncio de tanto dinero para sus bolsillos y que no les importa el pueblo, que siempre ha sido miserable e ignaro. Mientras más penurias sufran, mejor. ¡Ya llegaron las lluvias!
Haití está pasando por un terremoto político peor que el terrestre que les afectó hace 3 meses.
El Presidente no resuelve. Criminalmente no decide donde se van a construir las millares de casas donadas. Dicen que su esposa y otros mandan más que él, pues está obnubilado, deprimido y anonadado. Le queda poc tiempo de poder legal, y la ayuda está medio paralizada y desconcertada, las construcciones no pueden empezar masivamente, y ante esta desidia, poca efectividad, cuando empiece la dilapidación, y el inmisericorde y difuminador tiempo pase, los países se irán enfriando, vendrá el incumplimiento de sus ofertas, y el dinero que quede se gastará en comer, y todo quedará peor, y seremos los dominicanos los más afectados a corto y mediano plazo, pues nadie se deja morir de hambre.
Nada se hace para desacostumbrar a los haitianos de vivir de la caridad internacional, para sacarlos del “círculo perpetuo de la pobreza”.
Para el gobierno Dominicano es imposible hacer planes contingentes, pues sólo ve el futuro en cuanto a la reelección sin límite del perínclito de Villa Juana, y el saqueo constante del país, y ya se reparten los afiches: ¡Leonel 2012-2016! ¡Ya lo dijo en Colombia! Y lo repitió el funesto Chapulín Colorado de ojos verdes…
Sto. Domingo, R.D.* luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com *16/IV/2010