AMEN
Por: Luis H. Arthur http://www.luis.arthur.net/ http://www.luisharthur.blogspot.com/ 28 Agosto 2006-08-28
Dicen que el ser humano tiene libre albedrío. Sin embargo su nacimiento y muerte vienen regidos por voluntad ajena e inapelable. Algunos se suicidan y podría interpretarse como que la voluntad humana decidiera. Soy de los que creo que ya estaba prefijada y sólo fueron el instrumento escogido.
Es penoso cuando la gente buena muere. Hoy la prensa nos trae el deceso ayer de un hombre progresista de esta sociedad. Una persona que sirvió a su familia y a su país. Que dio múltiples empleos y ayudó a muchas personas y a muchas causas. Que creció y creó portentosas industrias casi de la nada junto a su familia. Que siempre dijo presente. Una persona en plena capacidad y demasiada experiencia. No dejó descendencia. Murió como dijo René Del Risco Bermúdez: “…tan sencillamente como quien se va…” Tras sí deja un vacío y un no comprender por qué gente como él se va y tantos que debieran irse campean por sus fueros y sus desafueros.
No le conocí a Don Eduardo León Asensio. No fui su amigo. Sólo le admiraba a distancia. Hoy somos todos un poco menos.
El país debería estar de luto. Quizás la tristeza del día de ayer, de cielo encapotado y lluvia constante, sin sol, sea el tributo de la naturaleza a un alma grande que nos deja y nos disminuye.
Republica Dominicana y directamente a Santiago sienten y lloran tan inesperada partida.
Dicen que la vida es trabajo y ya vendrá la eternidad para descansar.
Que su alma encuentre el descanso y la paz que su diario ajetrear quizás le negaron.
Descanse en Paz.
Amen.
