domingo, marzo 28, 2010

EL CHISME

Sin Temor… Ni Favor…

El Chisme

Luis H. Arthur S.

Los que somos de pueblos pequeños de tantas décadas atrás, recordamos claramente como las persianas encubridoras de las puertas y ventanas al exterior, eran sitios propicios para ver los acontecimientos y el comportamiento ajeno, y hacer las interpretaciones más diversas, que al pasar de boca en boca y concatenarse con otras percepciones pasadas, como glosario de una historia nunca concluida, adquirían un matiz a veces dañino pero siempre informativo de verdades parciales y diluidas entre exageraciones y mentiras, expresadas muy crudamente. Era el chime, que hasta fue catalogado como industria, que todos de alguna manera practicábamos, pero no con las asiduidad y maestría de algunas a las que se les daba el nombre genérico de viejas chismosas.
Nadie se escapaba. Así se sabía si don fulano llegó de madrugada borracho, que le gritó o golpeó a su esposa, o viceversa. Si una hija o esposa cualquiera había permitido que fulano de tal entrara por la ventana en la oscura noche mal iluminada, o en la ausencia del marido a plenas 10 de la mañana.
Nadie en la sociedad estaba a salvo y al hacer cosas que no eran bien vistas por la sociedad de entonces, se arriesgaban a que lo descubrieran y aun a que circularan pasquines anónimos.
Todos criticaban y condenaban el chisme, pero todos de alguna manera lo practicaban, y de hecho servía como freno, para que cada uno se auto controlara, pues podían verse desacreditados por sus acciones, aunque hay que admitir que también, como siempre y como ahora, se vertían calumnias interesadas y claramente injustas y hasta pagadas por parte interesada.
Al escuchar los videos que por correo me llegaron a mí y a tantos, de las alocuciones televisivas del Médico. Fadul, me vino a la mente la forma cruda en que los chismes eran expresados por los mejores exponentes, por los profesionales.
En aquellos tiempos no era común ni dable el sometimiento del chismoso por lo que dijo de la vida y honra de personas, con excepción de Trujillo y ciertos matatanes, y todo quedaba en enemistades, en pleitos que en algún caso aislado llegó al ataque físico y hasta la muerte de alguien.
Hoy la cosa es diferente. Tenemos radio, televisión, periódicos impresos y cada vez más digitales y al internet para darle publicidad a nuestros pareceres y denuncias, y muchos como este servidor los usamos y decimos muchas cosas duras pero con cierta altura, desligándonos del famoso chisme que suele considerarse sin fundamento.
El gobierno en sus principales funcionarios se ha visto expuesto al escarnio público, atribuible a actos que atentan contra su honor , su honradez y su dignidad, que lucen puros chismes, y en vez de someter ante los tribunales a dicho exponente, que dice así desearlo porque tiene las pruebas de todo lo expresado y que es considerado una persona de una vida de muchas luces y gran conocimiento y mejor entendimiento, quizás temerosos porque tantas aberraciones dejen de ser catalogados como chismes y se conviertan en verdades documentadas, optan por el expediente trasnochado de cerrar la emisora, aduciendo que tiene treinta años, si leyeron bien 30 años operando sin permiso desde los Cerros de Gurabo, no en Junumucú.
Esto luce una arbitrariedad y sólo se lo creen ellos, pues de ser cierto, como podrían justificar las autoridades que han hecho tantas modificaciones y ordenamiento de las frecuencias, de que esto haya sido así. De no probarse, quedará una mancha sobre el director de Indotel, quien se ha venido desempeñando como excepción en este mal gobierno.
Sto. Domingo, R.D.* luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com * 28III/2010