sábado, febrero 23, 2008

REINO TERRENAL

SIN TEMOR… NI FAVOR…

Reino Terrenal

Luis H. Arthur S.
Dicen que la historia es cíclica y que estamos llamados a constantemente repetirla.
Jesús fue un revolucionario que buscó un reino espiritual. Decía ser el hijo de ]Dios y traer las buenas nuevas, pero los jerarcas espirituales en ese tiempo no le creyeron y lo combatieron.
Era la humildad hecha persona. Sus bienes los llevaba consigo. Se movía, comía, dormía entre los pobres, aquella mayoría hacia los que dirigía sus predicas. Usaba alpargatas y caminaba. Alguna vez se trasportó en un burro, como sus padres.
El evangelio nos habla de que los Levitas y Fariseos lo miraban con inquina pues denunciaba sus flaquezas, lujos, riquezas y poder. Echó a los comerciantes del templo y limpio la casa del Señor. Quisieron sorprenderlo con la legalidad del pago de impuestos a Roma y la acusación de auto proclamarse Rey de los Judíos. Salió airoso al decir:¡Dad al César lo que del César y a Dios lo que es de Dios! y ¡Mi Reino no es de este mundo!
La forma de vida de esos jerarcas eran antagónica con las enseñanzas, las escrituras y sus predicas, y buscaron todos los medios posibles para apresarlo.
Juzgado y condenado fue sentenciado a una de las muertes más terribles de la época. El precio de la traición fueron 30 monedas de oro. Era mejor predicar bonito y olvidar lo predicado, que hacerlo como Dios manda y vivir en humildad.
Jesús murió y hace 2000 años nos enseñan su evangelio, a seguir su ejemplo, seguir su forma de vida. Amar al prójimo. Ser humanos, caritativos y piadosos en el actuar y el decir.
La Jerarquía Católica lo ha olvidado tantas veces.
Ha impuesto la creencia y la fe con muerte, guerras y hogueras. Disidentes internos fueron aplastados. Muchos de fuera y de dentro tiene la iglesia como negocio y forma de buena vida.
En la base hay tantos sacerdotes buenos, pobres, humildes y abusados por sus superiores.
Y es que el ciclo se repite. Se manipulan las muchedumbres. Y hay tanta confusión, tantas preguntas sin respuestas, tantas necesidades insatisfechas. Tanto malos ejemplos de predicar el evangelio y no vivirlo. Tantas malas juntas y declaraciones inconvenientes y poco piadosas. ¡Tantos retrocesos y malos ejemplos, donde las faltas sólo se ven en los pobres, que luce que es un reino terrenal!
luis@arthur.net * http://www.luis.arthur.net/ * http://www.luisharthur.blogspot.com/ * 22/II/2008