lunes, abril 20, 2009

RALLY FRONTERA I

Sin Temor… Ni Favor…

Rally Frontera I


Luis H. Arthur S.

Amanecía el viernes 27 de Febrero pasado, día en que conmemorábamos la Independencia Nacional. Había desdeñado la posibilidad de salir el Jueves 26 pasadas las 7:30 PM desde la Secretaría de las FF.AA. en Herrera y dormir en la Fortaleza de Santiago como muchos hicieron.
A las 5:15 AM ya estábamos en camino, un servidor y dos compañeros en mi Isuzu Trooper del 1999. Debíamos reunirnos con los demás participantes en el Monumento a las 8:00 AM, de donde partiríamos en orden numérico cada minuto. Era el Rally de las FF.AA. esta vez por la carretera Internacional, en la frontera con Haití.
Estos eventos despiertan mucho entusiasmo y la ruta, que ya se había hecho varias veces, pero yo no había participado, congregó a 162 vehículos 4x4, donde viajaban los fiebruces, sus esposas, hijos y amigos.
Todos íbamos preparados con lo necesario: comida, agua, casas de campaña, mapas y los organizadores proveyeron la logística y la seguridad.
En estos eventos familiares, de disfrute y conocimiento del país, no estábamos obligados a cumplir tiempos establecidos en ruta de un rally normal, y los que querían se podían ir como en paseo, deteniéndose, disfrutando, tomando fotos; mis compañeros y yo decidimos ir de paseo, por lo que antes de llegar a Santiago tomamos el desvío a San José de las Matas y fuimos disfrutando del paisaje, la neblina, el amanecer y el frio de esa región montañosa paradisíaca para los citadinos. Luego de un pequeño descanso, seguimos, cuando fueron llegando otros vía Monción hasta llegar a Loma de Cabrera. Al llegar, y dado que íbamos muy adelantados, preferimos comer temprano en el pequeño restaurant de Rosa frente al parque, y aprovechar y conocer el Monumento a la Batalla de Capotillo a unos 15 Km. Una hermosa edificación de hormigón no muy cuidada, donde las letras de los nombres de los héroes, en algunos casos han desaparecido, pero estaba limpia y solitaria. Al regreso al parque aquello era un hormiguero de vehículos y de unas 500 personas pidiendo servicio y alistándose para la partida. Loma de Cabrera una pequeña ciudad que hace honor a su nombre por lo escarpado de su topografía, estaba tranquila, bucólica, limpia y no se alteró por aquella inusitada avalancha de locos al volante.
S. Domingo, R. D. * luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com * 19\IV\2009