viernes, junio 12, 2009

LADRANDO A LA LUNA

Sin Temor… Ni Favor…

Ladrando a la luna


Luis H. Arthur S.

¿Y estos aumentos sólo en el precio van a resolver algún problema de suministro y calidad? No. Sólo escuchamos las mismas promesas de siempre, el mismo hablar bonito, de un hombre que las repite sin vergüenza y llega hasta creérselas de tanto oírlas y decirlas. Pero la acción no llega, y no se está instalando ni una sola planta, en 5 años nada ha hecho salvo gastarse el dinero en un Metro, que no era prioridad y ha fracasado en su objetivo, pero le dio comisiones para la compra de la reelección. Este pueblo tiene que reaccionar. Los empresarios del transporte cada vez que los atacan para que paguen la millonada que deben, o quieren conseguir nuevas prebendas, paran la ciudad. Lo mismo los que tienen el monopolio de la carga camionera en los puertos. Mientras nosotros sólo sufrimos, atacados por arriba y por abajo, sin atrevernos a siquiera a parar nuestros vehículos en la calle y perder un día de trabajo, para advertir que hay que respetarnos y que estamos dispuesto a manifestarnos para que cambien de política, para que dejen de comprar chaqueteros y partidos completos, para que desistan de ofertar senadurías, diputaciones, sindicaturas, etc. como si fueran de ellos, no del pueblo, y en eso están comprometidos todos los partidos grandes y la mayoría de los pequeños que sólo son bisagras para sus directivos, donde consiguen dinero, posiciones y se creen gente importante.
El PRD está en crisis, su actual Presidente, quien debió controlar su ambición hace tiempo, ha sido superado. Igual la mayoría de dirigentes. El Secretario General viola los estatutos y junto a Vargas Maldonado dan un golpe de estado institucional en dicho partido, ofertándole a los actuales electos repetir y todos ante esta propuesta indecente, le dan su apoyo “patriótico” enseñando el cobre de moneda falsa con baño de oro gastado, y juntos, le otorgan a Leonel y su combo inmunidad ante sus actos pasados, actuales y futuros.
Vargas Presidente se pavonea sin darse cuenta cabal que a Leonel no se le puede creer y menos confiar, y si no, que le pregúnten a Danilo.
El poder, como el alcohol, desinhibe a las personas, y las muestra tal cual son. Ya estamos llegando, sólo hay que ver el grado de corrupción y desfachatez de este gobierno, y el grado de sumisión de un pueblo que ya olvidó las dictaduras.
Santo Domingo * luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com * 11/VI/2009