ATRAPADO Y SIN SALIDA
Por: Luis H. Arthur S. www.luis.arthur.net www.luisharthur.blogspot.com 21 Marzo 2007
Cuando la capitalización del Sector Eléctrico, el Ing. Segura, era Administrador de la CDE y el Poder Ejecutivo lo designó para la firma de los contratos de capitalización. Tuvo muchas objeciones, y en un momento se negó a firmarlos. Muchos lo recordamos.
De todas maneras los firmó. En una comida que tuvimos hace poca más de un año, y cuando yo le recriminaba esa acción, nos dijo a todos los presentes, que tuvo que hacerlo porque el Presidente le pidió que lo hiciera. Los firmó por obediencia partidaria según él.
Cuando estampó su firma en esos contratos, por la razón que fuese, el compartía la responsabilidad total de lo que firmaba y sus objeciones originales de ninguna manera son ahora motivo para disminuir la responsabilidad que en ese momento adquiría y con el que además embarcaba a toda la nación.
El pertenecer a un partido, a un gobierno, no es excusa para irrespetarse a si mismo, ser irresponsable y hacer lo que entendía mal hecho.
Hoy el Ing. Segura, según un reportaje de El Nacional, dice que “él había advertido desde 1999 que los contratos firmados en el proceso de capitalización fueron vulnerables”. Sus palabras además embarran al Presidente y al Dr. Antonio Isa y los hace hasta pasibles de juicio.
El Ing. Segura es actualmente el responsable directo de defender al país ante las dos demandas internacionales de AES y asociados contra el Estado y la CDEEE. Con estas declaraciones le está haciendo un flaco favor al país por querer lavarse las manos como Pilatos. Sus palabras van a costarnos muy caro.
En un gobierno serio, que se respetara, esas declaraciones inoportunas en la prensa, serían motivo para su cancelación inmediata, pues no ha sabido entender, que él es cómplice de lo que se ha hecho, pues su firma auténtica está estampada es esos contratos, por los que el Estado es demandado en exceso de US$1,200 millones en EE.UU.
Esto se suma a la inacción de él y otros funcionarios han tenido con AES quien se niega conciliar cuentas por RD$900 millones, más RD$4,000 millones de perjuicio al Estado que la auditoria de la Cámara de Cuentas arrojó, más US$15 millones que su asociada Itabo “pago” en exceso por la reparación de las planta Itabo I y II, que RD ganó en la corte de EE.UU. y duerme aquí el sueño de los justos en un bufete muy reconocido.
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