miércoles, marzo 21, 2007

REELECCION II

REELECCIÓN II

Por: Luis H. Arthur S. WWW.Luis.arthur.net www.luiharthur.blogspot.com 20 Marzo 2007

Un país debe buscar el mejor dirigente para cada etapa. Es nuestra responsabilidad hacerlo bien, meditadamente, observando el comportamiento que el candidato ha tenido durante su vida.

Es algo como cuando elegimos un chofer para el vehiculo de la casa. Podemos equivocarnos como cuando elegimos al presidente pasado del PRD, o como el ingeniero que en Casa de Campo fue asaltado y herido por la complicidad de un chofer mal escogido. Sin embargo la democracia impone la alternabilidad y es la mejor de sus imposiciones. Si nosotros nos equivocamos es por bobos, soñadores, incapaces o aferrados a unas siglas y partidos a las que nos hacemos fanáticos y esclavos.

Siempre me ha sorprendido que un ser racional sea liceista o escogidista fanático, por decir algo, sin aquilatar cuál partido de los muchos existentes es el que mejores jugadores tiene en esa temporada y más probabilidad le damos de ganar, pues nuestra meta es adherirnos a la procesión de los triunfadores. No, somos fanáticos y sectarios, y con ello creo dejamos de ser seres racionales, para tener la fidelidad que obnubila la razón. Con los billetes y quinielas no actuamos así. Cada vez jugamos el número o la serie de ellos a la que le damos más probabilidad de ganar, aunque esta práctica no sea más que puro azar, no razón. Igual en la pelea de gallos o en el boxeo. Apostamos por el mejor.

En política no. Nos han lavado el cerebro haciéndonos creer que si alguna vez fuimos del PRD o del PRSC, o de cualquier otro partido, es una traición votar ahora por la mejor esperanza nacional, por el mejor hombre para cumplir nuestro mandato de gobernar bien y para provecho del bien común, no importa a cual de los carteles pertenezca.

Nos han hecho sustituir nuestra dominicanidad por un sectarismo dañino y alienante.

El mundo se mueve con el tiempo, ese parámetro tan difícil de entender y que nos marca y esclaviza a todos. El mundo es cambio. Hay hasta quien ha dicho que tememos que cambiar para seguir igual. Quien no cambia se estanca y hasta le llaman viejo, obsoleto, anacrónico, retrogrado.

Pero los políticos encabezados por el Presidente de turno no desean cambios. Quisieran detener el tiempo y como no pueden, quieren reelegirse.
luis@arthur.net