jueves, marzo 08, 2007

ROCK ASH III

ROCK ASH III

Por: Luis H. Arthur S www.luis.arthur.net www.luisharthur.blogspot.com 7 Marzo 2007

Esos US$6 millones por los que el Estado se tranzó con AES, de los US$80 demandados originalmente, llegarán al país en los próximos días según nos informa el Secretario de ½ Ambiente.

Supongo que de ese monto se deducirán el 30% o el 50% para pago de los abogados que aparentemente no hicieron bien su trabajo, al no basar la demanda en leyes aplicables. Total que nos quedarán algo así como una buena propina.

Con ellos vamos a disponer de esos desechos, entregándoselo a las cementeras para que lo conviertan en cemento Portland y se integren a la construcción de edificios y viviendas. Esto es, luce que vamos a pagar para regalarles supuesta materia prima a los fabricantes de cemento, para que luego de quemados nuevamente, pues son cenizas de combustión de de calderas, la usen. Es de suponer que ½ Ambiente ha realizado los estudios suficientes y necesarios para estar seguros que ese material no va a contaminar las construcciones en un alto grado, y poner en juego la salud de sus ocupantes.

Yo me pregunto, ¿si en Puerto Rico está entre otras la inmensa Cementera San Juan, por qué AES no les regala ese material a ellos? Supongo que los dueños de esas cementeras estarían más que contentos de recibirlos…. Sólo es una pregunta.
Como vemos, con los centavitos que nos resten y que aparentemente serán nuestros hasta que el juez federal de New York nos cante la lotería de los US$700 millones, si es que no nos bajamos los pantalones antes, no se pretende indemnizar a ninguno de los afectados con esa acción, permitida por la acción u omisión de Hipólito Mejía y Moya Pons. Tampoco a los pescadores que sufrieron pérdidas por la muerte y alejamiento de peces. Parece que tendrán que demandar al Estado que fue el culpable.

Luce que la “responsabilidad”, que sólo se comparte, no está sujeta a sanción, como acabamos de ver con los que tienen poder político en el caso Renove (o Re-robe como dicen algunos) que fueron exonerados de toda culpa. Aquí habría que decir aquel dicho muy viejo: “Justicia, cuantas injusticias se cometen en tu nombre”.

Lo que más me extraña es que el Juez Garzón, de amplia fama internacional diga que aquí la justicia avanza, cuando tantos estamos en desacuerdo con esa apreciación subjetiva.

luis@arthur.net