Sin Temor… Ni Favor…
Recapitulando X
Luis H. Arthur S.
Mientras nuestro Señor Presidente, el eterno ausente, habla bonito en New York sobre la seguridad en nuestro país, sobre el fallido plan de Barrio Seguro, que tan mal empezó que llevaron motocicletas Harley Davison de lujo y altas comisiones a sitios con calles y callejones donde esos bajitos y pesados equipos no podían hacer labor de patrullaje como en las amplias y buenas a carreteras de California. Donde los policías a los tres meses eran compadres, amantes, amigachos de todos, olvidando que sus deberes tenían que estar primero y sobre todas las cosas.
Esos motores eventualmente tuvieron que ser sacados y se les ve en el camino vecinal que nombran Autopista Duarte, parados en sitio fijo. Lugar de peaje privado para camiones, camionetas y se les ve conversando con vecinas y aburridos, sólo esperando la extorsión, mientras tantas cosas pasan donde se supone es su trabajo.
Les dice el Presidente a aquellos que embobados le escuchan, al igual que aquí, que podrían llevar ese concepto de Barrio Seguro a otros barrios, ya que la delincuencia bajó de 26.41 a 22.81, 3.40 homicidios, por cada 100 mil habitantes, una cifra bastante insignificante. Habla de los policías que hay en la calle, si, pero en toda la República y en múltiples actividades, pues gran parte están ocupados siendo choferes de funcionarios y personalidades, sirviendo a esposas y a queridas, cuidando casas, instituciones y embajadas, y casi un pelotón cuidando a Almeyda y hasta barriéndole la calle. Total que si hay 14,525 agentes en la calle, está contando a estos, no a los que cuidan a la ciudadanía de los ladrones, delincuentes y de parte de ese contingente que está dando tumbes de droga, matando para acallar voces, asaltando con pandillas comercios, bancos, agencias de juegos, ciudadanos, etc.
Cuando uno se acostumbra a decir tantas mentiras mezcladas con cada vez con menos verdades, se las llega a creer. Eso creo que está pasando con nuestro Señor Presidente.
Mientras esto pasa, la droga sigue lloviendo, y el General Rosado de la DNCD, está barriendo como escobita nueva, pero sólo puede capturar una parte, un poquito, pues los estamentos de poder no permiten otra cosa, y no juegan.
S. Domingo, R. D. * luis@arthur.net * www.luis.arthur.net * www.luisharthur.blogspot.com *24\IX\2009
